Eternidad (Los Inmortales #1) - Alyson Noël - Reseña y primer capítulo

Título: Eternidad (Los Inmortales #1)

Título original: Evermore (The Immortals #1)

Autora: Alyson Noël

Editorial: Montena

A la venta en castellano: 9 de octubre de 2009

Sinopsis:

Después de que un horrible accidente siegue las vidas de su familia, Ever Bloom, de dieciséis años, puede ver el aura de la gente, oír sus pensamientos, y saber toda la historia de la vida de una persona con sólo tocarla. Haciendo lo imposible por evitar el contacto humano y suprimir sus habilidades, ha sido etiquetada como bicho raro en su nuevo instituto. Pero todo cambia cuando conoce a Damen Auguste.

Damen es guapísimo, exótico, y rico. Es el único capaz de silenciar el ruido y la extraña energía en su cabeza; poseyendo una magia tan intensa, que es casi como si pudiera ver dentro de su alma. A medida que Ever se siente más y más atraída hacia su mundo de secretos y misterio, encuentra más preguntas que respuestas. Y no tiene ni idea de quién es él en realidad... o qué es. Lo único que sabe con seguridad es que se está enamorando profundamente y sin remedio de él.


Trailer oficial del libro:



Opinión personal:

Para ser sinceros, me esperaba bastante más de este libro.

Pero en vez de eso, al final resultó ser otro libro más como Crepúsculo. Eso sí, es lectura obligada para los incondicionales de Meyer (por si acaso no estaba claro, yo no me encuentro entre ellos). El personaje de Damen, de hecho, tiene un parecido más que razonable con Edward Cullen. Aunque a mí, sinceramente, esos libros en los que la chica se pasa páginas y más páginas parloteando sobre lo muchísimo que quiere, adora, ama, venera a su novio/acosador se me atragantan un poco.

Para empezar, nada más leer la sinopsis vemos que Eternidad es un libro completamente fiel a su género. No se esperan sorpresas, y eso está bien, porque no hay ninguna sorpresa. Tenemos a la chica rara, al chico guapíiiiiisimo (pero noooo, claro que noooo, no es nada superficial, es un amor repentino y profundo y eterno en cinco minutos), y un misterio muy misterioso envolviéndolo todo.

Yo tengo una teoría. En casi todos los libros juveniles y fantásticos, especialmente en los de vampiros (aunque los inmortales de este libro no son exactamente vampiros), hay lectores de mentes y algún pelirrojo por ahí suelto. Algún día haré una lista para demostrarlo... Así que en Eternidad, como librito obediente a su género que es, se deduce que habrá el lector de mentes y el pelirrojo de rigor. BINGO. Todos los inmortales leen mentes. Y Drina (la mala malísima) es pelirroja.

En cuanto a los personajes, Ever es demasiado buena, Damen es demasiado perfecto, Drina es demasiado mala, y los amigos de Ever son un par de pusilánimes sin personalidad ninguna. De hecho, no acabo de pillarle del todo el punto a Damen. Me gustó su ambigüedad, pero ¿de verdad que liga con Stacia sólo para darle celos a Ever? Y si de verdad vuelve a caer una y otra vez en brazos de la malísima Drina, ¿no significa eso que también él es malo? Y lo de los tulipanes que saca por doquier... Bueno, es el leitmotiv del libro, pero era algo prescindible (y un poquito cursi de más).

Las escenas de acción son flojuchas. Drina y Ever se enfrentan por Damen, cómo no, aunque es de agradecer que Ever no permanezca recogidita y bien protegida en una esquina mientras Damen saca el machomán interior y protege a la hembra indefensa en peligro, todo esto mientras se golpea el pecho para enseñar quién es el macho dominante. Aquí la buena de Ever sí es capaz de solucionar sus propios problemas (aunque sea con la inestimable ayuda de su amor verdadero). Sin embargo, las peleas no acaban de cuajar. Son precipitadas y con un final un tanto rebuscado (una pista: nunca subestiméis el poder del amor verdadero).

Creo que a estas alturas ya he terminado de poner verde el libro. Así que si alguien ha aguantado la reseña hasta este punto, también se merece que le diga algo bueno. Y seamos sinceros, el libro tiene cosas malas (como acabo de dejar bien claro), pero tampoco es una monstruosidad. El estilo de la narración es correcto, con ciertas pinceladas de humor, y aunque no ofrece nada nuevo se lee bien. La trama tampoco es novedosa, pero no es de las que se quedan atascadas y no terminan de avanzar. Y además de eso, el libro también tiene cosas buenas de verdad.

Por ejemplo, como ya dije, me gustó la ambigüedad de Damen, chico bueno/chico malo. Aunque lo que más me gustó de todo el libro no tiene nada que ver con la historia de amor: lo mejor del libro es Riley, la hermana pequeña de Ever que murió en el accidente de coche, el fantasma que no se quiere ir. En mi opinión, la historia de esa niña de doce años (que transcurre paralela a todo lo demás) es lo mejor de todo el libro. Como la serie de televisión Entre fantasmas (The ghost whisperer), pero sin tanta ñoñería.

También me hizo gracia la escena en la que Ever le dice a Damen que, para él, ella es como un fruto prohibido con patas: ¡¡leva seis siglos intentando tirársela!! Cierto. Y no entro en más detalles.

En conclusión: un libro juvenil, romántico, fantástico y previsible que entusiasmará a los fans de la saga Crepúsculo. Y para aquellos que no lo sean, como yo misma, tampoco será un trance horrible. De hecho, tengo pensado leerme la segunda parte.

Más información:

La segunda entrega de la serie se llama Blue Moon, se publicó en inglés ayer mismo (7 de julio), y llegará a España en marzo de 2010.

Para más información, visita aquí la web oficial de Alyson Noël

Descarga aquí el PRIMER CAPÍTULO TRADUCIDO al castellano