jueves, 17 de marzo de 2011

Para el día 5 de abril ya faltan menos de 20 días.

Y ese día sale a la venta Los Versos del Destino, o sea, el finalísimo final de Cuentos de Bereth, la trilogía de Javier Ruescas que reseñé hace pocos meses, y de la cual dije (me cito a mí misma, en el colmo de la vagancia): "En cualquier caso, no he llegado a darle el 5 con la única esperanza de que el tercer y último tomo, ese que ya estoy deseando leer, demuestre que sigue en progresión ascendente y se merezca, una por una, todas las cinco estrellas."

Por mi propio bien y el de mi reseña, espero no tener que comerme mis palabras...

En cualquier caso, dentro de unos días saldrá a patearse la blogosfera el trailer del tercer libro, que estará ilustrado con dibujos de Lola Rodríguez. (Además, esta mujer es toda una fangirl de Harry y Ginny, Katniss & Co, e incluso Bella y su flamante, reluciente y resplandeciente vampiro, así que tal vez os guste cotillear en sus trabajos por aquí.) Esta que tenéis aquí delante es una de las imágenes del futuro vídeo. Sírgeric con espada y cara de mala leche.



Por si vuestra memoria de nombres rivaliza con la mía en cuanto a cutrez; por si relacionabais a Sírgeric con una sonrisita burlona y no con este ceño morrudo, o por si no habéis leído todavía ninguno de los libros, os digo que Sírgeric es uno de los cuatro protagonistas. De hecho, allá por las primeras hojas del primer libro, había empezado con bastante mal pie...

Antes de intentar abrir los ojos de nuevo sintió que una cuerda atada firmemente a una silla le mantenía maniatado y que un pañuelo en su boca le impedía respirar con normalidad. Le habían cazado. […]

Enfadado consigo mismo, volvió a cerrar loas ojos… hasta que un sonoro bofetón le devolvió a la realidad.


―¡Despierta! ―le ordenó la mujerona que le acababa de golpear.


El ladrón abrió de nuevo los ojos y la miró enfurecido.

―¡A mí no me mires con esos ojos! ―le reprochó la mujer, soltándole otro bofetón. Las dos muchachas parecían asustadas.


―¡Soltadme y no os haré nada! ―quiso decir el ladrón, aunque con un pañuelo en la boca sonó algo así como: “fonfanfe fy fo fos fafé afa”.


―¿Qué ha dicho? ―preguntó la chica rubia.


Con cuidado, temerosa de que pudiese darle una dentellada a su mano, la muchacha morena le quitó el pañuelo de la boca, advirtiéndole:


―Si gritas, vendrá la Guardia Real. […]


―Os arrepentiréis ―les amenazó, intentando infundir a su mirada todo el desprecio de que fue capaz.


La mujer le dio otro bofetón, ¡y ya iban tres! La cara empezaba a enrojecérsele desmesuradamente.

Si queréis saber algo más acerca de la saga podéis encontrar información en su web, pero como esa información de las webs siempre es muy sosa en lo que a "¿leer o no leer?" se refiere, os dejo el enlace a mi reseña, que por eso la escribí yo y por algo recomiendo los libros.

Para terminar, os dejo la sinopsis del último libro. Y, encargada por tercera y última vez de la portada de la serie, Anna Maldonado.

La guerra está a punto de desatarse en el Continente. Los reinos del Sur se alían bajo las órdenes de Dimitri, quien amenaza con reunir un ejército sin precedentes y cobrarse su ansiada venganza. Adhárel, tal y como las Musas auguraron, ha compuesto la Poesía que podría cambiar el destino de todos. Y mientras tanto, al Norte, la joven Lysell se prepara para descubrir quién es, enfrentarse a su pasado y asumir su papel en un mundo plagado de trampas, peligros y desafíos.

martes, 1 de marzo de 2011

El Club de los Corazones Solitarios - Elizabeth Eulberg - Reseña

Título: El Club de los Corazones Solitarios

Título original: The Lonely Hearts Club

Autora:
Elizabeth Eulberg

Editorial en inglés: Point

Editorial en español: Alfaguara

Año en inglés: diciembre 2009

Año en español: febrero 2011

Yo, Penny Lane Bloom, juro solemnemente no volver a salir con otro chico en lo que me queda de vida.

De acuerdo, quizá cambie de opinión dentro de unos diez años, cuando ya no viva en Parkview (EE.UU.), ni asista al instituto McKinley; pero por el momento, he acabado con los chicos. Son unos mentirosos y unos estafadores. La escoria de la Tierra.

Sí, desde el primero hasta el último. La maldad personificada.

Algunos parecen agradables, claro; pero en cuanto consiguen lo que buscan, se deshacen de ti y pasan al objetivo siguiente.

Así que he terminado.

NO MÁS CHICOS.

So may I introduce to youuuuu...





...the act you've known for all these yeeeeeeeeeears...:

Érase una vez que se era una chica de 16 años cuya vida parecía una telenovela. Penny Lane quería tenerlo todo: una amiga con la que hablar de chicos, buenas notas para tener tiempo libre para salir con chicos, canciones de los Beatles que le hicieran pensar en chicos, y un chico. Nate.

Nate era su gran amigo de la infancia, alma gemela desde los tres años y acaparador de todos los primeros premios: Primer Amor Platónico, Primer Beso, Primer Rollo De Verano, Primer Novio, Primera Cena Con Los Suegros, Primera... Cornamenta.

En cuanto Penny se dio cuenta de que ya no podía pasar por las puertas sin que sus grandes cuernos chocaran contra el marco, le cantó las cuarenta al infractor: gritó, pataleó y recuperó su soltería. Y con Nate todavía subiéndose los pantalones y la Chica B abrochándose el sujetador, decidió que en su vida no existirían más hombres que los Beatles. Y fundó el Club de los Corazones Solitarios. Básicamente, un convento unipersonal de música, amigas y chocolate rico. Y, por primera vez en su vida, sin chicos de por medio.

Nunca.

Jamás.

... Hasta que empezara a la universidad.

E incluso entonces, con mucho cuidadito.

Pero el boca oreja es un arma potente: en cuanto las chicas adecuadas del instituto (guapas, populares y sin novio) decidieron solicitar la membresía del Club, se desató un fenómeno sin precedentes en las secundarias de todo el mundo: todas las chicas querían ser parte de la moda, todas eran amiguísimas de repente, ninguna quería saber nada del otro sexo... y Penny Lane, convertida en su presidenta, tenía que guardar ejemplarmente el voto de castidad y renunciar al Chico Perfecto. Un Chico Perfecto que, por una vez en la vida y de forma totalmente inconveniente, parecía estar poniéndole ojitos justo a la vuelta de la esquina.

De verdad: cambiar el mundo es un fastidio.


...Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Baaaaaaaand....:

Voy a ser sincera.

Me gustan las comedias románticas. Las he leído buenas y malas (y peores), pero esta es aceptablemente decente. Tú la lees, te diviertes, sabes lo que va a suceder antes de que suceda (porque eso es precisamente lo que esperas en cuanto compras un libro de este tipo) y pasas un buen rato. Luego la cierras y sigues a tu rollo y aquí no ha pasado nada.

En mi caso no hubo mucho más que eso. Mi memoria es un sitio esencialmente selectivo, y como leo muchos libros, hay algunos que recuerdo párrafo por párrafo por los siglos de los siglos (destinados todos ellos a convertirse en cansinas recomendaciones bloguiles), y hay otros que, en cuanto pasan un par de meses, ni siquiera recuerdo haber leído. Este libro encaja en un lugar intermedio. En líneas generales guardo un buen recuerdo de él, pero hasta que no rescaté el libro de la estantería ni siquiera podía decir de memoria el nombre de los protagonistas.

Lo que significa que es agradable, es divertido, es toda una declaración de amor a los cuatro de Liverpool (evidentemente), no hay parrafadas eternas, ni insultos a la gramática más elemental (única gramática que domina una servidora), ni tiene personajes cargantes, ni Macarras que piden a gritos convertirse en Macarrones, ni Niñas Tontas que sacan a relucir la vergüenza ajena del lector. Pero tampoco tiene párrafos que merezcan ser guardados en una libreta de citas importantes, ni personajes que llevarse a una isla desierta, ni situaciones sorprendentes que no hayáis leído antes en algún sitio.

Es decir, está bien, pero le falta originalidad. Una comedia romántica de tarde de domingo / fin de los exámenes / espacio entre dos dramones que queréis rellenar con algo ligero. Si es eso exactamente lo que buscáis, entonces adelante.