Breve historia de las portadas (25ª parte)

Instrucciones para ahorrar:

1. No tiréis cosas inútilmente:
Nunca sabéis si podrán volver a haceros falta (me encanta esta portada, pero soy incapaz de encontrar una gemela que esté verdaderamente a su altura, así que os la cuelo de estrangis).

2. Reducid el gasto en la casa:
Ya sabemos que la fruta es cara, pero nadie os mandó comprar melones.

3. Reducid el gasto en caprichos.

4. Nunca dejéis pasar un buen 2x1:
Una boca sin chica más una chica sin boca hacen una cara completa, y dos libros enteros.

(made in Jeka)

5. Reducid el consumo energético:
Falta de ideas es igual a ahorro, porque las ideas necesitan actividad neuronal, la actividad neuronal necesita glucosa, la glucosa necesita comida, y la comida necesita dinero. Y para hacer dinero hacen falta ideas, así que estamos en las mismas de nuevo.

(made in Ifigenia)

6. Utilizad energías verdes:
La próxima vez que hagáis planes, prescindid del coche y enrollaos sobre la carretera.

7. Reducid el uso de las nuevas tecnologías:
¿Para qué queréis una cámara réflex de tropecientos megapixels, acabado metalizado antitanques, lente de cristal de Swarovski y pantalla plana de 42 pulgadas? Con un boli Bic podéis obtener el mismo resultado por mucho menos dinero. Y además podéis elegir entre varios colores.

8. No recarguéis los espacios:
Nada de contratar decoradores para que os coloquen estatuas en todas las esquinas del retrete y una cenefa bicolor alrededor de las puertas. Usad la brocha gorda de hoy y de siempre para fondos y paredes, y colocad la jaula del hámster en un lugar bien visible del salón.

9. Sacadle partido a todo lo que enterrasteis en el cajón de las herramientas:
Os sorprendería saber la de cosas raras que guardasteis hace tropecientos siglos en algún rincón, con el total convencimiento de que algún día os harían mucha falta. Por ejemplo, se puede usar un único corazón de espino, ponerle un par de fondos distintos y meterle debajo un libro de incestos y otro de zombis. Pensad ahora en vuestro cajón de la morralla, y seguro que hay razones de sobra para frotarse las manos (y no sólo para sacudirse el polvo)...

10. Reciclad:
El fotochó puede ser el peor enemigo del buen gusto pero el mejor amigo del bolsillo (ay, el viejo truco del maquillaje... hoy por hoy ya nadie sabe lo que es eso).

(made in Mina)

11. Reciclad incluso las cosas más guarras:
Si tenéis gallinas, poneos vuestras botas de pisar mierda, id al gallinero y recoged un puñado de plumas. Cuando las dibujéis con ese boli bic tan maravilloso nadie podrá saber el aspecto tan cochino que tenían.

(made in Ifigenia)

12. Reciclad hasta alcanzar extremos de auténtica racanería.

(made in Jeka)

13. Y seguid reciclando, hasta fundar un nuevo Club De La Misma Chica De Siempre.

(conmigo, con Mina y con Ifigenia)

14. Resumiendo: echadle mucho morro al asunto.

(made in Ifigenia)

15. Y atended al maravilloso ejemplo de los famosos:
Porque los ricos también sufren, aunque sufran poquito. Fijaos, por ejemplo, en el cantante de Three Days Grace: trabaja pluriempleado como modelo, y no dio precisamente la talla para Calvin Klein.

(made in //Laura//)

Los de Green Day hicieron lo mismo, y por lo visto prestaron su imagen en Wake Me Up When September Ends para un libro. Si veis el videoclip, el parecido es todavía más exagerado.

(made in Mina)

Es que incluso las sufridas familias reales deben reducir gastos. La pobre princesa Leia, por ejemplo, tuvo que subvencionarse como pudo los caprichos de su época gótica. Por lo menos su presupuesto sí que cubría el maquillaje, y no usaba la brocha gorda más cutre del fotochó.

Pero no todo podía ser malo. Algunos con poco hacen mucho: escogen un efecto óptico bien conocido por todos y fabrican algo sencillo pero bastante más original que otras cosas.

Y los dibujos. Los dibujos no son cosa fácil, pero a no ser que sean muy feos, suelen ser bonitos (me he lucido con esa frase). Y estos, sobre todo el más gore de los dos, me gustan.

(made in Shigaya)

Y termino con una verdad demasiado cierta. ¿Quién de vosotros sabe ahorrar cuando pone el pie en una librería? (Santo Dios bendito de mi vida, este hombre me recuerda una barbaridad a Freddy Krueger y me acaba de poner nerviosa.)